lunes, 28 de noviembre de 2011

Cultura Valdivia

 

Valdivia es una cultura arqueológica precolombina que se desarrolló entre el 3500 y el 1800 a. C. en la costa occidental del Ecuador Se la encuentra principalmente en la Península de Santa Elena, (Guayas) y también en el estuario del Guayas, en los Ríos, Manabí y el Oro.

Historia

El desarrollo de la cultura valdiviana dio paso en la misma región a la cultura Machadilla y muchos de sus elementos culturales, como la cerámica, se difundirían rápidamente hacia las áreas vecinas. La gente de esta cultura fueron ceramistas que fabricaron figurillas femeninas, las más antiguas de piedra y luego de barro, a veces sencillas y otras más elaboradas, eran objetos relacionados con la fertilidad y la salud.
El descubrimiento de esta cerámica tan antigua fue en un baño público de la costa ecuatoriana, hace algunas décadas, trajo consigo fama para el Ecuador, desde el punto de vista arqueológico; pues valdiviana aparece como una verdadera cultura del Periodo formativo. No hay duda de que los valdivianos siguieron las tradiciones arcaicas de la caza, la pesca y la recolección de moluscos, pero no se encuentran hasta ahora pruebas claras de que la valdiviana fuese una cultura intensamente agrícola.

Ambiente y Localización

 

Pero lo más sobresaliente, es que tenían la costumbre y habilidad para trabajar la arcilla que obtenían del suelo para realizar hermosas piezas de cerámica, entre las que se destacan los figurines femeninos llamados hoy "venus", que muestran un culto especial a la mujer y la fertilidad.

Organización social

Como el resto de las sociedades de la época, la cultura valdiviana tendría una organización de tipo tribal. Regulaban su vida a través de relaciones de reciprocidad y lazos de parentesco, que aseguraban la supervivencia del grupo. Es posible que contaran con jefes y especialistas en las relaciones con la esfera sobrenatural. Un buen resumen de la arquitectura formativa y de los poblados tempranos que puede ser de interés para el lector fue escrito hace pocos años por Echeverría (1998). La presencia de entierros debajo del piso arcilloso de las chozas residenciales es bastante característico de muchas sociedades agrícolas. En efecto, los entierros sirven como títulos de propiedad que indican cual linaje es dueño de la propiedad. Quizás los valdivianos hacían lo mismo. En muchas sociedades agrícolas en este nivel de desarrollo en el mundo, la propiedad pertenece a las mujeres y los linajes se definen por el lado femenino ("sociedad matrilineal"). La presencia de una "matriarca" en entierro muy especial en el montículo del osario de Real Alto posiblemente refleje una organización matrilineal para la cultura valdiviana.
Este mismo entierro sugiere algo más que un simple sistema matrilineal, porque esta mujer recibió atención muy especial. Primero, su tumba fue recubierta por piedras de moler. Luego, a los pies fue enterrado un hombre degollado y descuartizado, evidencia de un posible sacrificio en honor a la mujer. Tercero, hay evidencia de siete entierros secundarios en la misma tumba, probablemente realizados durante distintos ritos posteriores. Otro dato interesando sobre el osario es la presencia de entierros de niños en lo que parece ser recinto muy especial.
Según estas observaciones, la sociedad valdiviana se estaba transformando en una sociedad no igualitaria. Uno de los rasgos del cacicazgo es la concentración de autoridad en manos de herederos, y arqueológicamente se puede observar esta práctica por medio de entierros con víctimas sacrificadas. Un niño con atención tan especial probablemente nació con un rango privilegiado, ya que no tuvo tiempo en la vida para ganar este estatus. En el sitio OGSE-80 de la cultura Las Vegas, se encontraron alrededor de 190 individuos en 61 pozos. A pesar de esta riqueza de evidencia, no hubo ninguna señal ni de desigualdad social ni de sacrificios.

Economía

Su economía era mixta, basada en la agricultura y la obtención directa de recursos naturales. Los cultivos principales eran maíz, porotos y calabazas. Es posible que también plantaran ají y maní, así como algodón. Recolectaban frutos silvestres como papayas, piñas, chirimoyas y paltas, cazaban venados, pescaban y recolectaban mariscos.
La cultura valdiviana dio paso, en la misma región, a la cultura Machadilla. Transmitiendo a esta muchos elementos culturales, especialmente aquellos relacionados con la innovación en la cerámica.

Arte

 

La cultura valdiviana destaca por ser una de las primeras sociedades americanas en que se masificó el uso de la cerámica. Confeccionaban principalmente ollas, cuencos y escudillas, siempre de boca ancha y base cóncava. Para la decoración de estas vasijas emplearon diversas técnicas: modelado, inciso o estampado, con las que realizaban motivos geométricos, sobre vasijas generalmente pulidas. Otro elemento destacable de la alfarería de esta cultura son las figurillas, las que en un comienzo fueron hechas de piedra y luego de cerámica. La mayor parte representa mujeres, que muestran distintas fases de la vida femenina, como la pubertad y el embarazo, el parto. La importancia que tenía el adorno personal para esta cultura, también se muestra en figurillas con bezotes o adornos labiales, collares y orejeras. Estos elementos se harían principalmente de conchas marinas como el molusco bivalvo Spondylus sp. y el caracol Strombus sp., que posteriormente tendrían gran importancia para la ritualidad de los pueblos andinos.
Sin embargo no hay una certeza absoluta en lo que se refiere a sus orígenes. Otros autores asocian el origen de la cultura valdiviana con grupos anteriores ubicados en la región amazónica, también basados en las semejanzas de su producción en alfarería.
La decoración de las vasijas se hicieron utilizando diversas técnicas, las principales fueron:
  • modelado
  • incisión
  • estampado
Utilizaron motivos geométricos, sobre vasijas generalmente pulidas.
Otro elemento destacable de cerámica de la cultura valdiviana son las figurillas. Las más antiguas fueron hechas de piedra, pasando luego a la cerámica. La mayor parte representa mujeres, que muestran distintas fases de la vida femenina, como la pubertad y el embarazo, el parto.

Venus valdivianas

Las Venus de Valdivia son figuras de barro y piedra, las estatuillas son famosas por resaltar las formas femeninas, usualmente desnudas, y por portar peinados de todos los tamaños. El peinado en esa cultura, mientras más elevado era, indicaba que la mujer tenía una jerarquía más elevada dentro de su grupo. Las figuras empezaron a ser de piedra, para pasar poco a poco a barro. La arcilla la recogían de su suelo y pronto se convirtieron en una referencia posterior, ya que fue una temática muy repetida. Por este hecho, vemos la diferencia estética y técnica de las diversas culturas que le precedieron.
Todas las figurillas de arcilla y piedra de la cultura valdiviana tienen los mismos rasgos, a saber: ojos simplemente como incisión y en forma de grano de café, línea gruesa de cejas que hace la forma de la nariz, brazos juntos en el cuerpo y piernas sin pies. Además, tienen formas redondeadas y todas ellas tienen marcado el sexo, sobre todo los pechos. Otro rasgo importante son los complicados peinados que todas ellas llevan.
Aunque se ha teorizado mucho acerca de su finalidad, cuestionándose también el nombre dado de Venus, se encontraron muchas de ellas en tumbas y enterradas en campos. Se cree que serían una especie de talismán para fecundar la tierra y para propiciar la fertilidad. Por ello, se haría hincapie en su sexo. Además, se han encontrado muchas de estas piezas y podemos ver cómo se representan los distintos momentos fértiles de la mujer: juventud, parto, embarazo.

Cultos fúnebres

 

El entierro de los difuntos se realizaba en los mismos montículos de las viviendas, aunque no está claro si éstas eran abandonadas después. A veces, los niños eran enterrados en vasijas cerámicas. Se han encontrado entierros de todos los tipos, primarios y secundarios, individuales y colectivos. Los perros domésticos también se sepultaban, siguiendo un patrón funerario parecido al de sus amos. La gran cantidad de figurillas fragmentadas encontradas en los sitios arqueológicos hace pensar que estas eran elementos de uso ritual, posiblemente asociados a la fertilidad, dada la se ven figurillas con la mejilla hinchada y pequeños recipientes para guardar la sustancia que libera el alcaloide.

cultura olmeca

 LA CULTURA OLMECA
La cultura olmeca es el nombre que recibe una cultura que se desarrolló durante el Preclásico Medio. Aunque se han encontrado indicios de su presencia en amplias zonas de esta área cultural, se considera que el área nuclear olmeca —o zona metropolitana— abarca la parte sureste del estado de Veracruz y el oeste de Tabasco. Se desconoce a ciencia cierta la filiación étnica —esto es, quiénes son los ascendientes de este pueblo—, aunque hay numerosas hipótesis que han intentado resolver la incógnita de la identidad de los olmecas. En ese sentido, es necesario hacer la aclaración de que el anónimo olmeca les fue impuesto por los arqueólogos del siglo XX, y no deben ser confundidos con los olmeca-calancas, que fueron un grupo que floreció en el Epiclásico en sitios del centro de México como Cacaxtle.
Durante mucho tiempo se consideró que la olmeca era la cultura madre de la civilización mesoamericana.
Sin embargo, no está claro el proceso que dio origen al estilo artístico identificado con esta sociedad, ni hasta qué punto los rasgos culturales que se revelan en la evidencia arqueológica son creación de los olmecas del área nuclear. Se sabe, por ejemplo, que algunos de los rasgos propiamente olmecas pudieron haber aparecido primero en Chiapas o en los Valles Centrales de Oaxaca. Entre otras incógnitas que están pendientes de respuesta definitiva está la cuestión de los numerosos sitios asociados a esta cultura en la Depresión del Balsas (centro de Guerrero). Sea cual haya sido el origen de la cultura olmeca, la red de intercambios comerciales entre distintas zonas de Mesoamérica contribuyó a la difusión de muchos elementos culturales que son identificados con la cultura olmeca, incluidos el culto a las montañas y las cuevas, el culto a la Serpiente Emplumada como deidad asociada a la agricultura, la simbología religiosa del jade e incluso el propio estilo artístico, que fue reelaborado intensamente en los siglos posteriores a la declinación de los principales centros de esta sociedad.


Historia
Se estima que los indicios más antiguos de la cultura Olmeca son de alrededor de 1200 a. C., y los más recientes son aproximadamente del año 400 a. C. La civilización Olmeca se constituyó principalmente alrededor de 3 centros ceremoniales: San Lorenzo, La Venta y Tres Zapotes, además de manifestarse en otros sitios como Laguna de los Cerros.
  1. San Lorenzo

El centro olmeca más antiguo registrado es el de San Lorenzo (1150 a. C. aprox.), situado en la cuenca del río Coatzacoalcos, en el estado de Veracruz. El inicio del florecimiento de la cultura olmeca en este sitio comenzó alrededor del año 1150 a. C., época de la que datan la mayor parte de las esculturas y elementos arquitectónicos que caracterizan a la cultura olmeca, muchos de los cuales se conservan en el sitio. San Lorenzo fue saqueado en el año 900 a. C., y las esculturas monumentales sufrieron un intento de destrucción; algunas se enterraron, y otras fueron trasladadas al centro ceremonial La Venta.

2. La Venta

También se han encontrado cabezas colosales y tronos, que merecen especial reconocimiento por el hecho de que para construirlas, tuvieron que ser transportados los enormes bloques de basalto desde la Sierra de los Tuxtla, a decenas de kilómetros de ahí, ya que por ser una zona pantanosa y arenosa, no había piedras. Se cree que pudo llegar a albergar hasta a 18.000 habitantes.

3. Tres Zapotes

El centro ceremonial de Tres Zapotes fue el último en desarrollarse. Es el más conocido porque fue el que sobrevivió hasta una época más cercana, pero la civilización olmeca que se desarrolló aquí fue una cultura ya en decadencia, no el esplendor que vivió en los centros ceremoniales anteriores.
Estos centros ceremoniales tenían función de ciudades, y en ellos se construyeron edificaciones de tierra y adobe, por lo cual han perdurado pocos restos. Se construyeron montículos con templos en la parte superior, lo que se podía considerar como un precursor de las pirámides mesoamericanas. También construyeron edificaciones en torno a patios centrales, característicos de las civilizaciones posteriores en la zona. Desde el 900 a. C. existen pruebas de bruscos cambios políticos; como muestra, el intento de destrucción de algunas de las cabezas olmecas.
Si para la mayoría de los especialistas como Michael D. Cae o Richard Dial, la cultura olmeca es originaria de la costa del Golfo (ZMO: Zona Metropolitana Olmeca), para la escuela francesa promovida por Christine Niederberger y desarrollada en particular por en: Caterina Magni, la cultura olmeca aparece como un conjunto multiétnico y plurilingüístico que se extiende sobre la mayor parte de Mesoamérica desde 1200 hasta 500 a. C.
La presencia olmeca se certifica en México (costa del Golfo, costa del Pacífico y altiplano central), principalmente en la zona costera del Golfo de México entre los ríos Papaloapan y Grijalva, pero también en lugares como Chalcatzingo (Morelos), Teopantecuanitlán (Guerrero).
Más allá de las fronteras mexicanas, vestigios de una presencia olmeca se encuentran en Guatemala (Takalik Abaj), Belice, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica.

Religión

Su religión desarrolló todos los temas importantes encontrados en los cultos posteriores. Tenían una religión politeísta, gran número de sus dioses eran relacionados con la agricultura y otros elementos como el sol, el agua, los volcanes, etc.
El centro de su religión es el culto al jaguar, y aparece representado en la iconografía olmeca. Se le representaba con la característica boca olmeca, de forma trapezoidal, con las comisuras hacia abajo y el labio superior muy engrosado. En muchos casos con colmillos muy pronunciados, adornos superciliares y el cráneo hendido. Siempre aparece representado de la misma manera. No se sabe qué tipo de dios pudo ser. Se cree que pudo ser el origen del dios de la lluvia, que se desarrollará posteriormente en muchos puntos de Mesoamérica.
Hay muchos animales considerados dioses, como el caimán, sapos, reptiles, todos animales de la zona. Normalmente, aparecen mezclados entre ellos, cabezas de unos y cuerpos de otros, creando seres mitológicos. En ocasiones para sus representaciones religiosas tienden a la abstracción, con lo cual no se sabe exactamente qué pudo significar.
 
Cultura 
Ya que la cultura olmeca fue la primera civilización en Mesoamérica, se afirma o se especula que muchos logros mesoamericanos tuvieron lugar por primera vez en el seno de su cultura. Entre otras cosas, se acredita a los olmecas el desarrollo del calendario, la escritura y la epigrafía.
Se cree que los olmecas fueron los primeros en desarrollar una escritura jeroglífica para su lenguaje, en 2002 se descubrió un caso que data de 650 a. C., y en 2007 otro de 900 a. C. lo cual supera en antigüedad a la escritura zapoteca, y convierte a la escritura olmeca en la más antigua del hemisferio occidental. Se han encontrado ciertas representaciones en algunas estelas que podrían ser petroglifos, y según algunos historiadores cuenta la vida de un gobernante, pero todavía no tiene la unanimidad de la comunidad internacional.
Arte 

El arte olmeca era muy complejo, tiene muchos elementos que aún se están investigando. Los más importantes y conocidos son posiblemente las Cabezas colosales Olmecas, que son un ejemplo de escultura monumental y una de sus mejores representaciones artísticas. Se cree que pueden representar a guerreros o a jefes. Se conocen 17 ejemplares, la mayoría de ellos repartidos entre el Museo de Antropología de Xalapa y el Parque Museo La Venta. Una característica llamativa de estas cabezas colosales es la marcada apariencia negroide, lo que ha llevado a diferentes conjeturas. Se han lanzado hipótesis, después rechazadas, que sugieren algunos contactos interoceánicos en tiempos antiguos. Las nueve primeras cabezas que se encontraron, estaban primero en San Lorenzo, y se trasladaron a La Venta, donde fueron enterradas. Se cree que podrían representar cabezas de enemigos, de ahí el enterramiento; o de jefes, y se enterraron cuando éstos murieron. Se cree que podrían tener rasgos idealizados, felinos, y de ahí ese aspecto. También se cree que son guerreros y no dioses por los cascos que llevan. Fueron construidas con basalto traído desde grandes distancias. Pesan varias toneladas, y miden hasta tres y cuatro metros de altura. En los lugares donde se establecieron los Olmecas había muchos animales y plantas que les sirvieron para alimentación, pero también aprendieron a cultivar trigo y vino que aseguraban comida para todos y ya no había necesidad de ir de un lugar a otro.

LA CULTURA VALDIVIA

Valdivia es una cultura arqueológica precolombina que se desarrolló entre el 3500 y el 1800 a. C. en la costa occidental del Ecuador Se la encuentra principalmente en la Península de Santa Elena, (Guayas) y también en el estuario del Guayas, en los Ríos, Manabí y el Oro. 
Historia 
El desarrollo de la cultura valdiviana dio paso en la misma región a la cultura Machadilla y muchos de sus elementos culturales, como la cerámica, se difundirían rápidamente hacia las áreas vecinas. La gente de esta cultura fueron ceramistas que fabricaron figurillas femeninas, las más antiguas de piedra y luego de barro, a veces sencillas y otras más elaboradas, eran objetos relacionados con la fertilidad y la salud. 
El descubrimiento de esta cerámica tan antigua fue en un baño público de la costa ecuatoriana, hace algunas décadas, trajo consigo fama para el Ecuador, desde el punto de vista arqueológico; pues valdiviana aparece como una verdadera cultura del Periodo formativo. No hay duda de que los valdivianos siguieron las tradiciones arcaicas de la caza, la pesca y la recolección de moluscos, pero no se encuentran hasta ahora pruebas claras de que la valdiviana fuese una cultura intensamente agrícola. 
Ambiente y Localización   
Pero lo más sobresaliente, es que tenían la costumbre y habilidad para trabajar la arcilla que obtenían del suelo para realizar hermosas piezas de cerámica, entre las que se destacan los figurines femeninos llamados hoy "venus", que muestran un culto especial a la mujer y la fertilidad. 
Organización social 
Como el resto de las sociedades de la época, la cultura valdiviana tendría una organización de tipo tribal. Regulaban su vida a través de relaciones de reciprocidad y lazos de parentesco, que aseguraban la supervivencia del grupo. Es posible que contaran con jefes y especialistas en las relaciones con la esfera sobrenatural. Un buen resumen de la arquitectura formativa y de los poblados tempranos que puede ser de interés para el lector fue escrito hace pocos años por Echeverría (1998). La presencia de entierros debajo del piso arcilloso de las chozas residenciales es bastante característico de muchas sociedades agrícolas. En efecto, los entierros sirven como títulos de propiedad que indican cual linaje es dueño de la propiedad. Quizás los valdivianos hacían lo mismo. En muchas sociedades agrícolas en este nivel de desarrollo en el mundo, la propiedad pertenece a las mujeres y los linajes se definen por el lado femenino ("sociedad matrilineal"). La presencia de una "matriarca" en entierro muy especial en el montículo del osario de Real Alto posiblemente refleje una organización matrilineal para la cultura valdiviana.
Este mismo entierro sugiere algo más que un simple sistema matrilineal, porque esta mujer recibió atención muy especial. Primero, su tumba fue recubierta por piedras de moler. Luego, a los pies fue enterrado un hombre degollado y descuartizado, evidencia de un posible sacrificio en honor a la mujer. Tercero, hay evidencia de siete entierros secundarios en la misma tumba, probablemente realizados durante distintos ritos posteriores. Otro dato interesando sobre el osario es la presencia de entierros de niños en lo que parece ser recinto muy especial.
Según estas observaciones, la sociedad valdiviana se estaba transformando en una sociedad no igualitaria. Uno de los rasgos del cacicazgo es la concentración de autoridad en manos de herederos, y arqueológicamente se puede observar esta práctica por medio de entierros con víctimas sacrificadas. Un niño con atención tan especial probablemente nació con un rango privilegiado, ya que no tuvo tiempo en la vida para ganar este estatus. En el sitio OGSE-80 de la cultura Las Vegas, se encontraron alrededor de 190 individuos en 61 pozos. A pesar de esta riqueza de evidencia, no hubo ninguna señal ni de desigualdad social ni de sacrificios. 
Economía 
Su economía era mixta, basada en la agricultura y la obtención directa de recursos naturales. Los cultivos principales eran maíz, porotos y calabazas. Es posible que también plantaran ají y maní, así como algodón. Recolectaban frutos silvestres como papayas, piñas, chirimoyas y paltas, cazaban venados, pescaban y recolectaban mariscos.
La cultura valdiviana dio paso, en la misma región, a la cultura Machadilla. Transmitiendo a esta muchos elementos culturales, especialmente aquellos relacionados con la innovación en la cerámica. 
Arte 

La cultura valdiviana destaca por ser una de las primeras sociedades americanas en que se masificó el uso de la cerámica. Confeccionaban principalmente ollas, cuencos y escudillas, siempre de boca ancha y base cóncava. Para la decoración de estas vasijas emplearon diversas técnicas: modelado, inciso o estampado, con las que realizaban motivos geométricos, sobre vasijas generalmente pulidas. Otro elemento destacable de la alfarería de esta cultura son las figurillas, las que en un comienzo fueron hechas de piedra y luego de cerámica. La mayor parte representa mujeres, que muestran distintas fases de la vida femenina, como la pubertad y el embarazo, el parto. La importancia que tenía el adorno personal para esta cultura, también se muestra en figurillas con bezotes o adornos labiales, collares y orejeras. Estos elementos se harían principalmente de conchas marinas como el molusco bivalvo Spondylus sp. y el caracol Strombus sp., que posteriormente tendrían gran importancia para la ritualidad de los pueblos andinos.
Sin embargo no hay una certeza absoluta en lo que se refiere a sus orígenes. Otros autores asocian el origen de la cultura valdiviana con grupos anteriores ubicados en la región amazónica, también basados en las semejanzas de su producción en alfarería.
La decoración de las vasijas se hicieron utilizando diversas técnicas, las principales fueron:
  • modelado
  • incisión
  • estampado
    Otro elemento destacable de cerámica de la cultura valdiviana son las figurillas. Las más antiguas fueron hechas de piedra, pasando luego a la cerámica. La mayor parte representa mujeres, que muestran distintas fases de la vida femenina, como la pubertad y el embarazo, el parto. 
    Venus valdivianas
Las Venus de Valdivia son figuras de barro y piedra, las estatuillas son famosas por resaltar las formas femeninas, usualmente desnudas, y por portar peinados de todos los tamaños. El peinado en esa cultura, mientras más elevado era, indicaba que la mujer tenía una jerarquía más elevada dentro de su grupo. Las figuras empezaron a ser de piedra, para pasar poco a poco a barro. La arcilla la recogían de su suelo y pronto se convirtieron en una referencia posterior, ya que fue una temática muy repetida. Por este hecho, vemos la diferencia estética y técnica de las diversas culturas que le precedieron.
Todas las figurillas de arcilla y piedra de la cultura valdiviana tienen los mismos rasgos, a saber: ojos simplemente como incisión y en forma de grano de café, línea gruesa de cejas que hace la forma de la nariz, brazos juntos en el cuerpo y piernas sin pies. Además, tienen formas redondeadas y todas ellas tienen marcado el sexo, sobre todo los pechos. Otro rasgo importante son los complicados peinados que todas ellas llevan.
Aunque se ha teorizado mucho acerca de su finalidad, cuestionándose también el nombre dado de Venus, se encontraron muchas de ellas en tumbas y enterradas en campos. Se cree que serían una especie de talismán para fecundar la tierra y para propiciar la fertilidad. Por ello, se haría hincapie en su sexo. Además, se han encontrado muchas de estas piezas y podemos ver cómo se representan los distintos momentos fértiles de la mujer: juventud, parto, embarazo. 
Cultos fúnebres
El entierro de los difuntos se realizaba en los mismos montículos de las viviendas, aunque no está claro si éstas eran abandonadas después. A veces, los niños eran enterrados en vasijas cerámicas. Se han encontrado entierros de todos los tipos, primarios y secundarios, individuales y colectivos. Los perros domésticos también se sepultaban, siguiendo un patrón funerario parecido al de sus amos. La gran cantidad de figurillas fragmentadas encontradas en los sitios arqueológicos hace pensar que estas eran elementos de uso ritual, posiblemente asociados a la fertilidad, dada la se ven figurillas con la mejilla hinchada y pequeños recipientes para guardar la sustancia que libera el alcaloide.

martes, 8 de noviembre de 2011